domingo, 28 de septiembre de 2008

CUATRO FORMAS DE APARENTAR QUE DESQUITAS TU QUINCENA 2


Continuamos con las recomendaciones para que parezca que desquitas tu quincena sin dejar el alma en la chamba ¡Aún en Lunes!

3. Siesta reparadora a media mañana
Algunos veteranos del trabajo de oficina han dominado el arte de dormir con los ojos abiertos. Hay muchas maneras de echarse un sueñito en la oficina sin poner en riesgo tu chamba. Aquí hay algunas tips:

· Echarse una jetita en el baño: puede no ser tan acogedor, pero seguro que nadie te descubriría.
· La siesta en la cafetería: asegúrate de terminarte el almuerzo antes de aventarte una siestecilla rápida
· Una pestañita en el elevador: funciona sólo cuando se trabaja en uno de los últimos pisos de un edificio realmente alto.
· El sueñito en el cubículo: El más atrevido y peligroso de todos. Necesitas poner la silla giratoria contra la pared del cubículo (un punto ciego para muchos supervisores), de frente al monitor de la computadora, e inclina un poco la cabeza como si reflexionaras en lo que lees.
·
4. Observa patrones de movimiento
Aunque parezca que los supervisores y directores merodean todo el tiempo, la verdad es que la mayoría sólo camina alrededor de la oficina en horas fijas. También tienen un patrón establecido por sus inspecciones diarias. Tu jefe dicta las pautas de cómo y cuándo puedes flojear en el trabajo. Anota los horarios de ronda del supervisor y los cubículos que usualmente inspecciona. A continuación, puedes programar tu descanso en esos periodos y fingir que trabajas cuando el jefe anda cerca.

Estos son sólo cuatro de las muchas maneras en que puedes pretender que trabajas. Definitivamente tienes que poner de tu parte para el progreso de la empresa, a fin de cuentas de eso vives, pero con estos consejos bien puedes evitar la fatiga y sobrellevar el infame tedio de esos lentos días en que el trabajo es simplemente una carga.

lunes, 22 de septiembre de 2008

CUATRO FORMAS DE APARENTAR QUE DESQUITAS TU QUINCENA


Seamos sinceros, algunos trabajos apestan. Tener encima a supervisores y directores merodeando por la oficina a la caza de haraganes y personas que no ponen atención y esfuerzo en sus horas de trabajo es algo absolutamente insufrible. Por mucho que quieras ser Empleado del Mes y contribuir a la cuota de productividad de la oficina, hay días en los que simplemente no se puede trabajar. Y aquello se vuelve doblemente peor los lunes por la mañana.

La buena noticia es que no tienes que hacer la chamba real para ser un miembro productivo de la clase trabajadora. Sólo tienes que fingir que estás muy ocupado en tu jale. Todo lo que necesitas es dar a los superiores la impresión de que eres un trabajador duro, y las bonificaciones y gratificaciones llegaran casi sin sudar. Aquí van algunas recomendaciones para parecer que estás realmente chambeando y desquitando tu quincena.

1. Convierte tu lugar de trabajo en tu espacio vital
¿Alguna vez te preguntaste por qué muchas personas que trabajan en un cubículo parecen zombis al final del día? Los cubículos son ataúdes para quienes viven y prácticamente parece que mueren en la oficina. Como buenos ataúdes, los cubículos vienen en acabado gris mate y colores que no hacen mucho para aumentar la productividad. La mayoría de las empresas no tienen normas relativas a la decoración en el espacio de oficinas, aunque los peluches y adornitos de Waldo´s debieran estar prohibidos y su uso penalizado. Aquí están algunas ideas para animar tu cubículo:

· Usa un montón de Post-It's. Cubre las paredes de tu cubículo con una gran cantidad de estos utilísimos cuadritos de papel, y pretende que estás obsesionado con el cumplimiento de los plazos, los objetivos y las tareas de la empresa. Los supervisores no suelen molestarse en leer lo que está escrito en los Post-its, por lo que puedes llenarlos con frases divertidas, direcciones de Internet, teléfonos de tus cuates o de otras cosas interesantes que puedes tener en mente al trabajar.

· Lleva algunos juguetes. Un cubo Rubik, algún videojuego portátil, un rompecabezas o algún crucigrama pueden ayudar a sobrellevar la vida en el cubículo. Sácalos tan pronto como el supervisor se vaya. Si no tienes juguetitos a la mano, no te preocupes, los clips, engrapadoras, perforadoras o incluso las plumas o cualquier otro artículo de tu escritorio pueden funcionar igual de bien, sólo tienes que ponerle un poquito de creatividad.

· Bebe una taza de café. Mientras tomas un placentero descanso para disfrutar de un delicioso café, puedes simplemente mirar la pantalla de la computadora y dar a tu jefe la impresión de que estás "haciendo un análisis serio".

2. Saca al primer actor que hay dentro de ti: Finge ocupación
Aparenta que estás realmente absorto en tu trabajo, eso es algo que los supervisores y directores siempre habrán de apreciar. A primera vista, puede parecer que estás escribiendo un informe largo y concienzudo, aunque realmente estés clavado reenviando el chiste que te llegó al correo electrónico.

Ponle corazón e intensidad a tu actuación, mira fijamente la pantalla, mientras pones algunas expresiones faciales de preocupación y estrés. Mientras que mantengas un ritmo constante al escribir, tu jefe no se preocupará por tu inactividad. También puedes gemir, quejarte o hacer algunos ruidos de molestia para hacer pensar a tu jefe que estás estresado.

Por ahora ahí le dejamos. Los otros dos consejos los pondré mañana... o pasado, hoy ya me dió flojera.

Pepe M.

P.D. Basado en un texto de http://lifehackery.com/ para que no me vayan a acusar luego de plagio.

P.D. de la P.D. saludos al Filósofo de Güémez.

martes, 16 de septiembre de 2008

“LAS GORDITAS DE DOÑA LUISA”


De manera indirecta, nos llegó el comentario de Jorge Trujillo, de que las mejores gorditas de Jaumave las hacía Doña Luisa, en la familia somos gente amante de visitar los alrededores y también gente de buen diente así que ni tardos ni perezosos nos enfilamos con rumbo a Jaumave.

A mi me gusta el municipio de Jaumave y me gusta transitar por la carretera Rumbo Nuevo, no me canso de mirar los paisajes asombrosos que esta ruta nos ofrece...Si, ya se que de repente no es “rumbo” sino derrumbo, pero eso sucede hasta en las mejores carreteras de montaña.

Volviendo a las gorditas...Para quien no es de la zona, ha de saber que la gordita es una tortillita; casi siempre de maíz, redondita y regordeta, que en Tamaulipas; una vez cocida, se rellena de diversos guisos, aclaro lo anterior porque aunque las gorditas están presentes en la gastronomía mexicana, lo cierto es que varían en su elaboración, las hay con manteca, que también se rellenan una vez cocidas y que aquí llamamos “bocoles”, están las gorditas típicas del resto del país y de Centroamérica que llevan manteca y a las cuales el relleno se les integra antes de cocerlas, sí, sería como la versión mesoamericana de la empanada inglesa, en fin que hay gorditas dulces de maíz y de harina..Sé que hay, unas gorditas dulces ¡que tienen frijoles!


En fin que las gorditas que comemos en Tamaulipas nos llegaron desde San Luis, en el caso de ciudad Victoria, dícese, llegaron de manos de la legendaria Doña Tota una potosina de mala fama como persona pero de buen prestigio como cocinera popular.

En el caso de Jaumave, aunque ligeramente más cerca de San Luis, la verdad es que la comercialización de las gorditas, es de reciente arribo, llegaron posiblemente desde Victoria a raíz, me imagino, del éxito de las gorditas estilo potosino de la señora Tota. Las empezó a vender un Señor Don Pedro según me platicaron y cuya familia tiene varios negocios en Jaumave. Casi todas las gorditas que he comido en Jaumave me han gustado, pero no tanto como las de Doña Luisa, que martaja el maíz en metate como en los viejos tiempos, de los guisos ni hablar mejor pida surtidas porque todos los rellenos valen la pena.


Las gorditas de Doña Luisa las puede uno degustar en la calle obregón 837 allá en Jaumave. No hay letrero afuera, mejor pregunte y después de almorzar dese una vuelta por el pueblo y por los alrededores, los balnearios son dignos de visitar.

Por cierto a modo de breviario cultural Jaumave fue la segunda población que fundó el conde de Sierra Gorda, José de Escandón, en la primera mitad del siglo 18 con familias procedentes del Guadalcázar, jurisdicción de San Luis Potosí.

martes, 9 de septiembre de 2008

LA BATALLA


Los sonidos de la batalla cada vez se escuchaban más cercanos.
En la línea de fuego, un subalterno se dirige a su superior.

- Comandante, nuestras fuerzas están siendo diezmadas. El enemigo es muy poderoso. Estamos registrando un gran número de bajas. ¿Qué vamos a hacer?

- Llame a los refuerzos soldado, no podemos dejar que nos derroten así como así. Necesitamos la presencia de los Blancos.

- Señor, el huésped no contribuye en nada, no hace lo necesario para ponerse a salvo. Las condiciones en las que se mueve provocan la proliferación de los agentes nocivos.

Un fuerte estruendo se escucha y las hordas enemigas hacen su arribo. Poco es lo que los bravos defensores pueden hacer ante la feroz arremetida.

- Comandante, ¡han penetrado las defensas! ¡Son demasiados y se empiezan a apoderar de todo a su paso!.

- No hay nada que podamos hacer ya, soldado. Anuncie la retirada. Ante un embate de tal magnitud ni los Blancos podrían ayudar en este momento.

Poco a poco el calor fue subiendo, señal inequívoca de que el enemigo había logrado la victoria.

Las pocas defensas que quedaban, caían presa de la ferocidad de los agentes enemigos. El avance mortal era imparable.

- Si hubiéramos conocido con anterioridad al enemigo, habríamos sabido qué hacer. No es posible que nos tomara desprevenidos.

- Imposible soldado. Las miles de caras que pude mostrar hacen que su ataque sea difícil de prevenir. Debemos reconocerlo, nos han vencido.

Más allá del campo de batalla, un escalofrío recorría el cuerpo del huésped. El fluido que empezaba a salir de su nariz y el malestar que se apoderaba de su cuerpo evidenciaban la irremediable situación: Estaba enfermo de gripe.


Pepe M.

viernes, 5 de septiembre de 2008

ANOTHER BRICK IN THE WALL


Me acordé de Pink Floyd.

Los Lego están de moda. Si, esos ladrillos de plástico que sirven para armar miles de cosas están de moda.

Yo los conocí hace muchos años como Play Mobil, al menos así se les conoció en México, no sé si en algún otro país también, pero resulta que esos ladrillitos tienen más de cincuenta años y originalmente eran de madera.

En 1934 Ole Kirk Christiansen, un carpintero pobre de Dinamarca, comenzó a fabricar unos bloques de madera para armar juguetes y los bautizó como LEGO a raíz de la frase danesa leg godt, la cual significa "juega bien".

Cuando el plástico hizo acto de presencia en los procesos de producción masiva, Ole Kirk se adaptó a los cambios y comenzó a producir juguetes de plástico. Uno de los primeros juguetes modulares producidos por LEGO fue un camión el cual podía ser desarmado y re-ensamblado.

Pero fue hasta agosto de 1978 que apareció una figura humanoide para acompañar los bloques Lego: El Lego Policía. Desde entonces, los personajes de Lego han aparecido en 104 "kits" de la compañía, que ha obtenido unos ingresos de más de cuatro mil millones de dólares gracias a esta pequeña creación.

Ese número se traduce en que cada segundo se venden 3,9 figuras en el mundo, es decir, unas 122 millones al año.

Aunque al inicio la empresa fabricaba las figuras con rosotros amarillos, expresión facial "alegre y neutral", y que no respondieran a ningún tipo de raza, sexo o profesión, todo esto cambió con la llegada del Lego Pirata en 1980.

Ahora, podemos encontrar reresentaciones de Lego de cualquier cosa, dsde los tradicionales policías, carpinteros y médicos, hasta los personajes de moda o históricos, como vemos en la imágen que adorna este post.

Por eso la frase de Pink Floyd da título a esta entrada del blog.

"All in all it's just another brick in the wall". Un ladrillo (brick) de Lego, por supuesto.


Pepe M.

martes, 2 de septiembre de 2008

LA LUCRATIVA INDUSTRIA DE LA COMIDA CHATARRA


La carita sonriente de Sabritas (la carita feliz, diría el slogan) me acompañó durante mi infancia, tumbado en algún sillón o en el piso, viendo las inolvidables tardes de caricaturas que nos ofrecía el Tío Gamboín.

A los papás de esa época no les preocupaba que sus hijos comieran papitas, churritos, gansitos, pingüinos y demás fauna golosinesca, pues a fin de cuentas, los niños de entonces podíamos comer eso y más sin problema, pues la obesidad infantil se veía como un problema lejano o ajeno. Total, nomás las comíamos mientras veíamos la tele, que nomás era un rato en la tarde y luego quemábamos todas esas calorías y demás, corriendo y jugando libremente en las entonces seguras calles.

Hoy, el mundo moderno nos ha enseñado que todo aquello que con gusto nos reventábamos de chavillos, a los niños globalizados de hoy los conduce a padecer problemas de obesidad y otros derivados de una mala alimentación y una vida sedentaria, presa de la tele y las nuevas tecnologías.

Antes había siempre un niño, que era el gordito del salón. Hoy en las escuelas podemos ver que hay salones de gorditos. Sin duda, comer tanta comida chatarra le está cobrando factura a los niños de hoy, hijos del videojuego, del dvd y de los canales de caricaturas las 24 horas del día.

Cualquiera podría decir que una solución es prohibir la comida chatarra y desterrarla de la dieta de los chiquillos y las chiquillas posmodernos. Pero... una nota que apareció en el periódico El Universal, me ha dejado pensando.


De acuerdo con esta información, los niños mexicanos se gastan ¡¡¡¡¡VEINTE MIL MILLONES DE PESOS ANUALES EN COMIDA CHATARRA!!!!!! y eso tan sólo en las cooperativas escolares, sin contar las tienditas de la esquina ni los supermercados.

Veinte mil millones de pesos... Toda una industria de la comida chatarra... una cantidad de lana, que bien haría tambalear la economía de uno o varios estados del país, si de repente y en un arranque de conciencia, los padres de familia prohibiéramos de manera tajante la comida chatarra a nuestros niños y se eliminara de las cooperativas escolares.

VEINTE MIL MILLONES DE PESOS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! La cifra por sí sola, hace que me dé un escalofrío, porque mis neuronas no alcanzan a dimensionar la cantidad exacta que eso representa.

La obesidad infantil es un problema que ha ido creciendo. Una problemática que no podemos soslayar... pero VEINTEMIL MILLONES DE PESOS ANUALES es una cantidad que también mueve a la reflexión.

Yo no se tú, pero después de esto, esa carita feliz de las Sabritas ya no será tan fácil de apartar de mi mente.

Pepe M.